Durante los próximos años, este tránsito estimulará tu interés en una conciencia superior y una verdad espiritual.
Pero si no tienes cuidado, puedes estar totalmente equivocado y confundir tu visión del mundo.
Los efectos de este tránsito son más bien abstractos, por lo que el tratamiento de ellos también debe ser un poco abstracto.
Vives en el mundo como un ego, es decir, como un yo consciente de ser distinto de otros seres y de tener tu propio curso de vida.
Una forma en la que te distingues de los demás está entre tu punto de vista y tu perspectiva general sobre el mundo, que está simbolizado por la novena casa.
Neptuno rige una energía que proviene de un reino más profundo del ser donde no hay ego ni ser diferenciado.
Todo es uno bajo este planeta. En consecuencia, Neptuno difumina las distinciones entre tú y los demás, e incluso difumina las distinciones en el mundo mismo.
Para la mayoría de las personas, el efecto de Neptuno en la casa novena es exponerlos a ideas e influencias que difuminan su habitual punto de vista, y les dificulta hacer distinciones.
Puedes confiar menos en tu forma de tratar con tu mundo, o puedes estar confundido y desorientado.
Pero estas no son consecuencias inevitables del tránsito.
Los problemas que crea este tránsito surgen porque estás tratando desesperadamente de reemplazar las ideas que el tránsito ha invalidado con otras nuevas.
Pero por la influencia de Neptuno, cada nueva idea aparece tan poco válida como las antiguas.
La forma de manejar este dilema es esperar y permitirte no saber, darte permiso para ser ignorante.
Con el tiempo, nuevas formas místicas y espirituales de manejar el universo se cristalizarán en la niebla neptuniana. Comenzarás a entender tu relación con el universo, y verás que todo es realmente uno, como lo muestra Neptuno.
Son solo los frenéticos esfuerzos de supervivencia de tu ego los que confunden todo.
Sin embargo, todavía hay un escollo a tener en cuenta con este tránsito, incluso cuando lo manejas tal como está descrito en el párrafo anterior.
Desafortunadamente, una vez que aceptas la lección espiritual de Neptuno en la novena casa, comienzas a usarla como una forma de ser superior a los demás, lo que te devuelve al juego del ego otra vez.
Comienzas a deambular solo en tu propio pequeño mundo intelectual, cada vez más alejado de los sentimientos de los demás y menos compasivo hacia aquellos que piensan diferente a ti.
Eventualmente saldrás fuera de esta fase, pero puede que no ganes mucho de ella.
Neptuno transitando la novena casa no es un buen momento para jugar juegos de ego con otros.
Es tiempo de aprender y agradecer por lo que has aprendido.
-R. Hand (Traducción: Miguel Caparrós)
No entiendo, es malo entonces este transitorio? Va a hacer que haga laz cosad inconsciente que me vaya mal qie sea engañada que me meta en una religion que no tenga criterio propio es algo asi como aterrador. Si me voy al extranjero voy a perderme su me asocio me van a engañar voy a caer presa no entiendo porque es tan malo este transito y me niego a creer que una persona pierda la autonomia la cordura el poser de desicion me enoja. Las religines son malas odio que te limiten la libertad como es esto posible
ResponderEliminarNo, ningún tránsito es malo, ni nos va "a obligar" a hacer lo que no queramos hacer.
EliminarLas religiones son malas para unos y buenas para otros, que cada uno siga su propio camino según su propio entendimiento. Eso es la libertad. Sin odios. Sin enojos.
Vivir y dejar vivir, esto es una buena filosofía de vida, ésto es Neptuno en tránsito por casa 9, entender que cada uno debe vivir la vida según su propio criterio, y no imponérselo a nadie.
Uff, tengo a Neptuno transitando por mi Casa IX, junto a Júpiter y Quirón (dichoso Quirón..). Creo que nunca me ha costado tanto fluir, es como si tuviera dos grandes fuerzas opuestas tirando de mi y me siento agotada. Por un lado siento que no sé nada y tengo ansia de conocimiento, y por otro, que sé demasiado y no me gusta lo que sé.. Gracias por el articulo.
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