martes, 12 de mayo de 2020

LA FORTUNA EN LOS SIGNOS (Leo, Virgo, Libra y Escorpio)

La Fortuna en Leo
Existe aquí una gran ansia de actuar como el centro de atención de todos y de estar al mando. Mediante su propia maestría el individuo pretende ser la fuente de inspiración y guía para los demás. Un líder debe dirigir, y no debe eludir los problemas y responsabilidades que sólo él tiene la voluntad y el poder de resolver.
Una gran felicidad proviene de la realización de logros a gran escala que, de algún modo, permanecen como brillantes ejemplos y símbolos de lo que el hombre es capaz cuando utiliza todo su potencial.

Esta persona no sólo busca su propia superación, sino también la de toda la sociedad. Cualquier cosa que se consiga por métodos deshonestos no tiene la menor importancia para el individuo con la Fortuna en Leo.
Con esta posición uno se centra en el concepto del amor personal. Es necesaria una cierta retroalimentación para que esta persona sienta que su generosidad, ambiciones y objetivos avanzan por el camino correcto.
Aunque la energía de Leo es muy poderosa, tiende a ser bastante rígida. Siguiendo tradiciones o principios específicos, el individuo lucha por mantener su vida dentro de unos confines que le aporten honor, prestigio, dignidad y respeto.
La admiración que recibirá a la larga por ellos es el cuerno de oro al final de este arco iris.

La Fortuna en Virgo
En este caso el individuo logra una gran felicidad creando en su entorno un sentido de “pureza organizada”. Busca limpieza, no sólo en su higiene personal, sino también allí donde vive y trabaja. También experimenta un tipo de limpieza en la forma en que se organizan los pensamientos.
Debe, sin embargo, dirigir su vida hacia una existencia altamente consciente, dedicada al “aquí y ahora”. Este individuo procura estar constante y conscientemente ocupado, dejando poco espacio para que las emociones negativas de los demás invadan su conciencia.
Así, lo que parece ser una preocupación por una realidad mundana, en realidad está aportando a esta persona una suprema sensación de felicidad mediante una organizada percepción de la vida.

 La limpieza de cuerpo y mente es importante porque facilitan la experiencia de una clara simplicidad de pensamiento, no desordenado por factores externos innecesarios.
Aprendiendo a autodisciplinarse, será capaz de acabar surgiendo por encima de emociones negativas, a través del uso positivo del polo opuesto en Piscis que le conduce hacia una paz interior. Su objetivo principal es funcionar bien y a fondo.

 La felicidad prometida por la Fortuna en Virgo procede de enfrentarse con el presente de una forma tan eficiente que los detalles nunca se acumulan, hasta poder llegar a convertirse en una pesada carga del pasado al futuro.

 Tanto Piscis como Virgo representan energías de servicio: Piscis, el del servicio compasivo a los demás. Virgo representa el servicio al Yo. 
Cuando este individuo funciona a pleno rendimiento, los demás necesitarán mucho de sus capacidades y él querrá ayudar.

 Para este individuo el cuerno de oro es cualquier cosa que tenga entre manos y con la que esté tratando en el momento presente. La energía de Virgo se orienta hacia lo tangible. Vive en el mundo de las cosas. Mediante una organización conveniente, cuidado y limpieza de estas cosas, la Fortuna en Virgo encuentra su papel.

La Fortuna en Libra
El individuo consigue aquí su mayor felicidad mediante la cooperación con alguna energía que podemos llamar de “no autoafirmación”. 
Es más cómodo llevarse bien con los demás que expresar deseos personales que podrían perturbar la armonía que busca en las amistades que uno mantiene.
Existe una tentativa de mezclarse con los deseos de los demás. Eso origina un contínuo cambio en su punto de vista en un intento de ganar aceptación de los demás.
Esta persona sabe que ofender a los demás imponiéndoles enérgicamente sus propios deseos, pone en peligro amistades y relaciones. Así, en lugar de afirmar su propia voluntad, trata de cooperar con cualquier situación y circunstancia de la vida sin tener que buscarla.
Raramente toma decisiones importantes por sí mismo, como parte de la gran totalidad que consiste en fuerzas que están más allá de su control.
Siente que imponer su voluntad sin considerar esas influencias hace que uno no esté en armonía con el flujo que guía la vida.

El vínculo de las relaciones personales, basado en el mutuo respeto, satisface a todas las personas involucradas.
Este individuo siente que tiene la necesidad de pertenecer a algo, o ser parte de algo.
Busca acabar con ese sentimiento de lo incompleto, encontrando a personas y circunstancias que representen ideas y experiencias que definirán su espacio vital.
En un intento de convertirse en un “ego menor” e inofensivo, desarrolla un carácter amable y diplomático que sabe cómo agradar y complacer.
Cuanto más sea capaz de hacer esto, más capaz será de experimentar una satisfacción interior que, en parte, procede del conocimiento de que él nunca será personalmente responsable de la creación de circunstancias inquietantes.

 La Fortuna simboliza aquí un equilibrio en el centro del zodíaco. Es una ventana a través de la cual un individuo ve todas las posibilidades, y sin embargo, nunca establece una identidad personal con ninguna de ellas.
Mantiene un delicado equilibrio, experimentando aspectos de muchas personalidades, pero sin establecer nunca una que sea única y suya propia.
No obstante, mediante la experiencia de toda la vida que le rodea es capaz de desarrollar cierta sensación de contento. 
Sabe que puede tenerlo todo sin querer nada; tocarlo todo, sin poseerlo. 
Permanece simbólicamente en el centro de todo pensamiento. Es una verdadera paradoja: sin esperar nada, lo espera todo.

 El individuo con la Fortuna aquí experimenta, en menor medida, todas las energías del zodíaco. Libra, al permanecer en el centro, permite que éstas fluyan a través de una persona de modo que en su conjunto formen un individuo completo. Una sensación de felicidad y contento se origina al sentir que uno pertenece a todo. Esta comprensión le acerca más a la conciencia de no-deseo, que será la base de la verdadera satisfacción.

 Sin necesidad de ayudar, o de dar de mala gana a los demás lo que uno no tiene, la persona con esta posición es capaz de equilibrar toda experiencia y sentimiento y llevar una vida relajada.
El equilibrio se consigue nivelando sentimientos opuestos, los suyos propios o los de otras personas, hasta que se sienta una unidad.
Actuar como un recipiente o canal para la vida permite que esta persona desarrolle el sentimiento de ser impersonal.

 El cuerno de oro al final de este arco iris es saber que las energías creativas, a partir de las personas que hay en su vida y los deseos de éstos, determinará el modelo de la propia vida.
Así, de forma bastante inusual, uno se ve impulsado a no tomar nunca una decisión, sea esta correcta o equivocada. 
Fluyendo con las fuerzas que dirigen su vida, uno permite que se tomen las decisiones necesarias.
Existe una gran paz al saber que el mundo cuida de tí, en todos los sentidos, durante todo el tiempo. Aquí radica la secreta felicidad de la Fortuna en Libra.

La Fortuna en Escorpio
Aquí, el individuo consigue su mayor felicidad al participar en el proceso de regeneración.
Esto está relacionado con la sexualidad, en el plano físico, y la búsqueda espiritual en los más altos niveles mentales y emocionales.
La sexualidad, la esencia de la vida y la fuerza creativa, se convierte en un factor muy importante en el carácter de este individuo. Existe un intenso deseo de investigar el sentido de la vida. Ésta es tarea fácil para alguien con este entusiasmo, espíritu y percepciones penetrantes.
Esta persona también tiene un fuerte sentido del crecimiento y de la evolución humana. Todos estos factores se combinan para dar la capacidad de profundizar en lo desconocido, para estar en el centro de todos los principios y finales.

 La energía de Escorpio está siempre luchando por descubrir todo lo nuevo. Desea desarraigarse del orden establecido para mejorarlo. 
La energía de Escorpio aquí se orienta a socavar todo lo que ya no es válido.
La Fortuna situada en Escorpio armoniza a un individuo consigo mismo y con los niveles de pensamiento inconscientes de la sociedad. 
Se siente orgulloso de su capacidad para avanzar constantemente a pesar de esas fuerzas generalmente desconocidas.
Busca la realidad mística del universo.

 La energía del Signo opuesto, Tauro, es constructiva, mientras que la energía de la Fortuna en Escorpio es asoladora y destructiva. 
Ambas cosas son necesarias para llevar a cabo el proceso que llamamos evolución. Los viejos edificios se demolen para que puedan erigirse otros nuevos
en el mismo lugar.
La persona con la Fortuna en Escorpio es la única que puede tanto demoler, como diseñar y construir edificios.
Este individuo experimenta un insistente tipo de energía que nunca le deja descansar.
Ansiando crecer, buscar y comprender todo lo invisible, su felicidad nunca echará raíces en una existencia pacífica.
Es un transformador de hombres porque le descontenta la falta de movimiento y progreso que ve en cuantos le rodean.
La sexualidad es simplemente el motor que le mantiene en movimiento. Le proporciona un poderoso sentido de intimidad que forja el intenso sentimiento de una conexión con las profundidades de la verdad.
No le enloquecen las fachadas sofisticadas y percibe claramente la realidad.
Vivamente en armonía con las fuerzas de la naturaleza, Escorpio posee una percepción más altamente desarrollada que la de cualquier otro signo del zodíaco.

 A través del signo opuesto, Tauro, a esta persona se le permite experimentar la energía de la relajación y la satisfacción. Esto actúa a modo de un contrapeso para la intensidad de Escorpio. Y sabe que a la larga este es el objetivo de todo el mundo. Pero no puede aceptarlo por sí mismo hasta que sienta que se lo ha ganado.

 El cuerno de oro al final de su arco iris proviene de jugar un papel activo trabajando hacia la construcción de un mundo seguro y pacífico, no porque trate de hacerlo así conteniéndose, reprimiendo e inhibiendo sus instintos, sino porque está más en contacto con la fuente de toda vida.
Es muy feliz cuando es capaz de iluminar a los demás y mostrarles los nuevos senderos que temían considerar.

-La Fortuna en el Horóscopo. M. Schulman


7 comentarios:

  1. Hola Miguel, me gustaría consultarle sobre el infortunio y lilith en la carta natal.

    He leído que hay astrólogos que le dan importancia a estos aspectos y otros que en cambio comentan que no son tan importantes.

    También quería saber sobre si los quincucio, las semicuadraturas, los semisextiles, etc son aspectos muy importantes en las cartas astrales.

    Muchas gracias

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  2. Hola desconocida. El Infortunio en la carta es un punto donde seguramente deberemos vivir alguna experiencia difícil, pero seguramente necesaria para nuestra evolución.
    Lilith sugiere algún tipo de miedo, o sombra de duda, en un punto de nuestra carta.
    Dan información útil.
    Yo siempre utilizo los Quincucios en la interpretación, es un aspecto de tensión en la carta que necesita una toma de conciencia y algún tipo de reajuste. El orbe máximo 5º
    Los otros aspectos menores que mencionas no suelo utilizarlos, pero si lo haces que sea con orbes más estrechos, unos 2º. Saludos

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    1. Entonces, si en mi carta se presentan Quincucios de menos de 5° de orbe por ejemplo, 1'76° también los debo tener en cuenta. Con el tema de las orbes dando perdida

      Gracias !!!

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    2. Máximo 5° de orbe. 1°76' es menos de 2° por lo que aplica, o sea, debes tenerlos en cuenta.

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  3. Ivy al Final del laberinto25 de enero de 2023, 2:33

    Hola Miguel. Gracias por tu Tiempo compartido con nosotros
    Hablando de Quincuncios te voy a preguntar por la Figura del Yod o Dedo de Dios que consiste en un doble Quincuncio cerrado por un sextil. No sé si aquí se limita más el orbe de los Quincuncios porque a mi siempre me indican en la carta 1 solo, el de Urano a 25º en Virgo en la 12 con Saturno 21º45' en Aries en la 7.
    Resulta que también tengo a ese Urano en sextil con Neptuno a 24º47' en Escorpio en la 2. Este Neptuno estaría pues en Quincuncio con aquél Saturno en Aries 7 en un orbe de 3º. Tendría pues un Yod en esa figura geométrica de un triángulo muy alargado compuesto por 2 quincuncios de 150º +- 5º coincidiendo en el vértice en Saturno y cerrado por el otro lado con un sextil de 30º +- entre ellos?? O sería como he leído a algún autor que no es un verdadero Yod porque para éso en el vértice debe de estar situado el Planeta más lento??
    Gracias por tu atención y un Saludo

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    1. Hola Ivy. Según entiendo yo ese Yod está en orbe y activo. Pero la mejor manera de comprobarlo es que observes si esa energía se manifiesta en tu vida.
      Saturno ápex, o en el vértice del Yod, puede significar que debes integrar esos dos planetas transpersonales (Neptuno y Urano) de forma consciente y realista (Saturno). Las relaciones de pareja te pueden dar la estabilidad necesaria para que manejes e integres esas energías, que pueden ser disruptivas sin el apoyo y la estabilidad que te puede aportar una convivencia responsable y comprometida (Saturno en casa 7). Un saludo

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    2. He reflexionado sobre eso que me dices y creo haber encontrado certezas. He sido muy Procrastinador, siempre perdido en fantasías (Luna en Cáncer) y misticismos (Neptuno) convencido de que tengo un talento creativo innovador (Urano) pero cuando intentaba aplicar disciplina, me duraba poco el empeño
      (Saturno afligido en Aries) y se acababa pudriendo el sueño de tanto sobarlo sin apenas materializar nada. Entonces se iba gestando una enorme energía de ruptura fruto de emociones como la culpa, el hastío, la incomprensión de que es lo que había mal en mi que me impedía avanzar, ni siquiera probar y fracasar podía; al final siempre quedaba la frustración que todo este clima psicológico me producía y acababan petando mis relaciones, dejaba todo y huía a otro lugar, otro trabajo de mantenimiento, pensando que quizás comenzando de nuevo construiría el edificio mejor; eran catarsis cíclicas que me activaban la esperanza de un nuevo intento exitoso con alguna novedad, con nuevos periodos de terapia, de búsqueda ansiosa por descubrir el "Clic" que hiciera funcionar Todo, pero siempre acababan igual; todo esto último lo veo provocado por mi Plutón en XII conjunto al Urano y también en sextil con Neptuno, como un tanque de combustible apegado al Yod que reventaba toda la estructura cuando no daba sus frutos después de determinado tiempo, resonando también en mi cargada Casa VIII con Sol y Venus conjuntos.
      En fin, una ratonera...como las de tantas otras personas supongo.
      Ya hace tiempo que intuí que lo único que me faltaba era la disciplina Saturnal (el Apex que resuelve y da cumplimiento a toda la Estructura) y el esfuerzo Marciano, y he empezado ya hace algún tiempo a HACER, y ahora lo he terminado de tener claro del todo con tu explicación.
      Infinitas gracias Miguel

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