SATURNO TRANSITANDO AL SOL NATAL

El tránsito de Saturno a nuestro Sol (especialmente la conjunción), ha sido temido innecesariamente por la astrología tradicional. 

Con eso no quiero decir que no nos pueda traer ciertas tensiones. Pero mucho depende del modo en que hayamos desarrollado nuestra autoestima y honrado nuestra integridad en nuestra evolución interior.

La estructura de nuestro ego y la fuerza de voluntad, son temas que salen a relucir en esta etapa.Este tránsito afecta sobre todo a la Casa en que esté presente nuestro Sol, pero hay que prestar atención también, pues nos dará una información adicional, a la Casa en donde tengamos a Leo, ya sea que esté en la cúspide o interceptado.

Este tránsito es, por lo general, una etapa de autoevaluación reflexiva, donde tenemos la oportunidad de sopesar nuestro crecimiento gracias a los desafíos que hayamos pasado anteriormente en nuestra vida, y ver esas áreas donde aún necesitamos perfeccionarnos o mejorar en algún sentido.

Saturno trata de ayudarnos a definir qué es lo que en verdad funciona en la esencia más íntima de nuestro ser. 

¿Nos encontramos en equilibrio sobre una base firme? 

¿Estamos en la senda correcta de crecimiento y madurez? 

¿Realmente nos merecemos prosperar y avanzar en nuestro empleo o trabajo?

Obviamente, la respuesta a estas preguntas dependerá del aspecto que Saturno esté haciendo a nuestro Sol; si está en cuadratura y no en trígono cambiará la situación, pero esto sólo nos estará indicando una forma distinta de encarar el mismo asunto. 

Saturno siempre será Saturno y el Sol es siempre el Sol. Quizá cambien los diálogos pero no los papeles.

Ciertas facetas de nuestra vida están aminorando su paso, y nuestra conciencia (el Sol) siente la presión de asentarse y concentrarse en las prioridades esenciales.

Saturno en tránsito arrancará todo aquello que sea innecesario, y tal vez estemos dedicando demasiado tiempo y energía en asuntos que no nos llevan a ninguna parte.

 Generalmente esto ocurre en el área profesional.  

Tal vez nos sentimos empantanados en una situación nada satisfactoria, con muy pocas esperanzas pero con un montón de trabajo pesado que realizar aquí y ahora.

Esto ocurre sobre todo con los aspectos tensos, incluido el Quincucio.

Es posible que no veamos otra alternativa más que trabajar con ahínco, al mismo tiempo que acumulamos frustración y resentimiento por dentro.

Si esta pesada realidad fuera la que estuviéramos viviendo ahora, debemos empezar a sincerarnos con nosotros mismos. 

En este caso Saturno requiere que nos cuestionemos qué podemos hacer y qué no para cambiar la situación. ¿Cuáles son nuestros límites? ¿Podemos exigirnos un poco más todavía?

Tal vez la vida nos coloque en ese lugar que consideramos que nos merecemos, pero nada de esto ocurrirá si adoptamos una mala actitud con respecto a la autoridad interior y exterior. 

Algunas personas pueden incluso tener choques con sus jefes debido a esta frustración interior.

Cualquiera que sea el caso, Saturno aspectando al Sol no quiere que rehuyamos de nuestras responsabilidades, que escurramos el bulto o que andemos culpando a los demás de nuestros problemas e incapacidades.

No podemos pretender solucionar rápidamente los problemas que nosotros mismos hemos creado y están ahí desde hace mucho tiempo. 

Saturno no cree en la magia. 

No esperemos que suceda un milagro que lo resuelva todo, sino darse cuenta de que ha llegado el momento de organizar nuestra vida encarando nuestros problemas, de uno en uno, y esto es lo que obrará maravillas. 

La pasividad ahora solo alimentará aún más a los problemas.

También nos daremos cuenta de que no disponemos de la misma energía física habitual, pues este tránsito resta cierta vitalidad al Sol, por lo tanto es importante que apliquemos nuestras fuerzas con un propósito y una dirección concreta.

La salud puede llegar a ser una preocupación para aquellos que, de manera crónica, fueron negligentes con los propios cuidados. 

¿Podemos acaso crear un poderoso imperio si estamos enfermos o débiles? 

Tal vez debemos reconstruirnos con una buena alimentación y el adecuado ejercicio, antes de emprender nuevos y exigentes proyectos.

Pero si ya estamos en buena forma y atendimos conscientemente todas nuestras responsabilidades, Saturno en contacto con nuestro Sol puede llegar a señalar una etapa de cuidadosa iniciación de proyectos prácticos que no requieran de resultados rápidos, porque este tránsito favorece un proceso de desarrollo más lento.

Algunas personas pueden deshacerse de antiguos compromisos y relaciones que ya no favorecen el crecimiento (sea laboral o personal).

Con un tránsito de Saturno a nuestro Sol en trígono, la gente con autoridad puede ayudarnos si estamos dispuestos a recibir con agradecimiento estos contactos. 

Esta gente puede representar el papel de Saturno, de sabio consejero, ayudándonos a alcanzar nuestras necesidades de manera más eficiente.  

Este es un período en nuestras vidas donde, o no podemos hacerlo todo solos, o no tenemos las respuestas correctas, entonces necesitamos que Saturno nos dé su experto consejo de la manera que él escoja como buena.

En general los tránsitos de Saturno por nuestro Sol se convierten en una época para simplificar nuestras vidas, poniendo orden en la experiencia que hayamos adquirido ya, y enfocándonos en la expresión más acertada de quiénes somos en verdad, y no en los términos que nos puedan definir los demás.

Esta es una buena época para estar solos, más que para mezclarnos demasiado con los demás, o para estar soportando una mala relación.

Se necesita un cierto grado de soledad y tranquilidad para poder escuchar a nuestro corazón más atentamente.

No debemos intentar alcanzar, insensatamente, el poder o una buena posición, sino darnos cierto tiempo de descanso para poder reflexionar sobre nuestro auténtico yo.

¿Qué sucede si, en cambio, nos hallamos en un pozo oscuro de depresión, sintiéndonos unos fracasados porque nuestra vida no funciona en absoluto?Entonces Saturno se convierte en nuestro ángel guardián disfrazado, ayudándonos a conectar con nuestro propio poder para que dirija con éxito nuestra vida.

Saturno nos despierta y nos hace saber que ahora podemos revitalizar nuestro ego y nuestra voluntad, lenta y sanamente.

Podemos tomar medidas para volver a reparar nuestras partes rotas donde sea necesario, pero también para tirar la basura psicológica o emocional, y enfrentar plenamente todo aquello que necesitemos hacer para salir de este estado, logrando así alcanzar un sentimiento más fuerte respecto a nosotros mismos y a nuestra vida.

 -Bil Tierney. “Saturno en tránsito”