lunes, 23 de abril de 2018

SATURNO EN LA CASA X NATAL

Cualquier planeta que esté en la Casa 10, implica un impulso personal que necesita las salidas adecuadas para su expresión.

Cuando este planeta es Saturno, sobre todo si está cerca del Medio Cielo, podemos llegar a sentir, de manera semiconsciente, que la sociedad está permanentemente evaluando quiénes somos en un sentido mundano, y qué pretendemos hacer para agregar algo importante a esta estructura colectiva.

Damos por sentado que el mundo no sólo nos observa y nos juzga, sino que nos exige que produzcamos algo tangible, sólido y perdurable, de modo que nos sentimos presionados a emular un comportamiento cívico modelo, en algún nivel.

Al estudiar los Aspectos de nuestro Saturno natal, podemos destacar nuestras ventajas y nuestros puntos débiles en este contexto.
El tiempo trabaja a favor de las metas saturninas, y retirarnos prematuramente antes de dar lo mejor de nosotros, incita a sentir mucha culpa y frustración crónica.

Tradicionalmente, también, se nos advierte que involucrarse en tácticas despiadadas o en desagradables juegos de poder, puede conducirnos finalmente a una caída desde una gran altura.

La única cosa que no podemos dominar es el destino, el cual, en este caso, conspiraría contra nosotros, utilizando todos los recursos que estén a su alcance. La historia lo confirma, y nos estimula a que nos aferremos a un poco de poder cuando nos lo hayamos ganado honradamente, pero que este no se nos suba a la cabeza y perdamos toda medida y la adecuada perspectiva. 
Tenemos que no sobrepasar los límites razonables y realistas.

Con Saturno en la Casa 10, suelen haber varias posibles manifestaciones. 
Un padre insensible, frío y sumamente restrictivo, quien rara vez se nos abrió emocionalmente, ni compartió su verdadera naturaleza con nosotros. Este padre se convierte en un misterio para nosotros.

Otro posible resultado sería un padre con una tranquila y digna presencia, debido a su estilo confiable y seguro. 
Puede ser un modelo en cuanto a su paciencia, persistencia y su estabilidad. 
También pudo alcanzar el éxito material, pero así y todo, no mostrar su lado tierno y cálido a nadie. 
Y esto, realmente, no nos beneficia mucho, pues también a nosotros nos puede resultar difícil abrirnos emocionalmente con nuestros seres queridos.

Otra posibilidad pudo ser la de un padre ausente, bien porque se murió o porque se divorció, y luego se mantuvo a distancia debido a lo amargo de ese divorcio.

Y aún otra posibilidad sería la de un padre que, ante el desafío y la confrontación agresiva de otros, se acobardó (tal vez pensando que era lo más prudente), y no presentó batalla por sus derechos.
Si luego nosotros hacemos lo mismo, alguna vez de adultos, dándonos la vuelta y huyendo ante una agresión o abuso, le echaremos la culpa a nuestro padre, y también podemos ser duros con nosotros mismos, al no habernos atrevido a actuar con firmeza.

De todo esto, la lección que nos trae Saturno en la Casa 10, es la de mostrarnos nuestras lecciones kármicas, en cuanto a asumir la responsabilidad por nuestras acciones.

El punto principal aquí, es que la experiencia con nuestro padre parece influir en la manera en que tenemos de afrontar el concepto de autoridad, y el compromiso con el deber y la responsabilidad. 
O de cómo fracasamos en el intento de interactuar exitosamente con el mundo entero.

En algún momento, debemos hacernos cargo de nuestra propia capacidad de enfrentarnos con lo social, sin culpar, de manera contraproducente, a la falta de aceptación de nuestro padre (o al ejemplo que nos dió), como una forma de justificación por no poder nunca ascender o aspirar a lo mejor.

Saturno en la Casa 10, nos da la capacidad de tener firmeza y perseverancia, en la consecución de nuestros objetivos, por mucho que estos se demoren por cualquier dificultad o problema.

Finalmente, después de haber alcanzado el tan ansiado logro material y social, ¿a qué más podemos aspirar? 
Ahora será el momento de seguir ascendiendo, apuntando al cielo ilimitado, y poder volar. 
A medida que envejecemos de forma sabia, tal vez seamos capaces de abandonar la búsqueda incesante de logros materiales, y nos centremos en cultivar en nosotros una realidad diferente.

Saturno es el planeta del discípulo en el sendero. 
Tal vez no sea necesario tirar todo lo logrado por la borda, para ir en pos de lo espiritual e intangible, pero sí el que centremos nuestra energía en asuntos menos mundanos. 
Y esto puede ir desde cultivar un pequeño jardín, como también el de cultivar nuestro jardín interior.

-Bil Tierney: "Las doce caras de Saturno"


3 comentarios:

  1. Buenas! aquí en cuarentena desde Argentina leyéndote, felicitaciones x este blog, sumamente enriquecedor y de atractiva lectura. Me REsuena este Saturno en mi casa 10, en conjunción con el Medio Cielo y en cuadratura con mi ascendene (piscis) y oposición a mi Quirón... siento que "debo" cumplir con mi rol social más que disfrutar de mi rol en sociedad... y cuando lo disfruto es hermoso! pero esa responsabilidad cuando se transforma en "deber" me bloquea y me culpabilizo... Presiento que mi quirón en oposición quizá sea como una barrera... lo ves así? Mi herida quironiana que estoy curando todo el tiempo quizá me demande demasiado tiempo y por eso no le doy arranque al medio cielo y a mi carrera profesional por así decirlo...mmm..algún comentario? (padre culpógeno sí, queriendo sanarlo en la manera que me dan las energías).
    Saludos y muchas gracias por este espacio***

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola sofi. Saturno es tu planeta más elevado en tu carta, es tu amigo no tu enemigo. Conseguirás éxito profesional y prestigio cuando expreses las cualidades saturninas de disciplina, constancia, responsabilidad, buen hacer, etc. Pero tienes ciertos desafíos para conseguirlo.
      Quirón en casa 4 indica una herida de parte de tu padre, posiblemente no te valoraba lo suficiente, ni estimulaba tu potencial profesional.
      Deja de culparte tú ahora a ti misma si no consigues la excelencia al instante, pues esto es un proceso progresivo y constante, fruto del esfuerzo y la constancia. No tienes que intentar sanar nada, simplemente sigue adelante sin desmayo ni duda. Cuando consigas el éxito profesional y el prestigio consiguiente ya habrás dejado atrás esas heridas.
      Tu ascendente Piscis también dificulta tu éxito saturnino, pues Piscis se dispersa demasiado, le cuesta centrarse en un objetivo material.
      Pues esa es tu tarea. Deja atrás el desánimo y la culpa y expresa ese precioso Saturno en medio cielo que la vida te ha regalado. Ánimo y cree más en ti.
      Saludos

      Eliminar
  2. Enriquecedora información. Gracias🙏

    ResponderEliminar

(Deja tu comentario. Lo publicaré en cuanto lo vea).