SATURNO TRANSITANDO LA CASA 7
Cuando
Saturno entra en nuestra Casa 7 llegó la hora de la verdad para nuestra
relación de pareja.
Llega
el gran maestro y nos pregunta: “¿Vale la pena realmente que continuemos con
esta relación?”, o tal vez es nuestra pareja la que se esté haciendo ahora esa
pregunta.
A
Saturno no le disgusta tener que luchar y esforzarse por salvar lo que merezca
la pena ser salvado, pero sí le disgusta enormemente cualquier fantasía o
nebulosidad a la hora de juzgar si un asunto tiene un futuro viable, o si por
el contrario nos estamos empeñando en mantener una relación por motivos
equivocados, como por no estar solos, por mera costumbre, o por miedo a lo
desconocido.
Aún
si nuestra relación es bastante buena, con un tránsito de Saturno por nuestra
7ª Casa (la de la pareja, y de las relaciones íntimas y personales), deberemos
hacer un buen reajuste y un acto de sinceridad plena, para mejorar cualquier
aspecto de la relación que hayamos dado por sentado por la fuerza de la
costumbre.
Lo
acostumbrado no tiene por qué funcionar toda la vida. Hay ocasiones en que
debemos prestar una mayor atención y realizar esfuerzos en mejorar lo que deba
ser cambiado.
Si
en cambio, la relación ya está gastada y el deterioro es grande, Saturno nos
forzará a abandonar esta unión, aun cuando parezca que los abandonados somos
nosotros y sea nuestra pareja quien nos pida el divorcio.
Finalmente,
lo que este tránsito quiere es que seamos más responsables y que desarrollemos
nuestra fortaleza interior, y en ocasiones ésto sólo lo logramos haciéndonos
cargo por completo de nuestra vida.
Aún
cuando los textos antiguos digan lo contrario, este tránsito puede ser un buen
momento para que quien esté soltero encuentre y formalice una relación de
pareja sólida y duradera.
Sólo
que debemos llevar cuidado y abrirnos realmente al amor, con confianza, para
que no atraigamos a una pareja fría y autoritaria.
No
es un padre o una madre lo que necesitamos tener ahora en nuestra vida; más
bien es una relación de confianza y de respeto mutuo (además de mucha madurez y
compromiso), lo que debemos atraer a nuestra vida, si es que estamos ya
suficientemente maduros y autosuficientes.
No
por la motivación de no saber estar solos, pues entonces Saturno nos dejará sin
pareja un tiempo más, o nos dará una que sea fría y dura, para que aprendamos
esa lección de autosuficiencia pendiente de aprobar.
Este tránsito es la culminación de un proceso
que comenzó hace 14 años, cuando Saturno cruzó nuestro Ascendente.
La
necesidad fue entonces la de redefinirnos según nuestra propia visión interior
de quién y qué somos, independientemente de lo que piensen otros de nosotros.
Ahora
es el momento de experimentar quiénes somos mediante el encuentro y la relación
con los demás, a través de la relación de pareja y de las asociaciones íntimas.
Las
relaciones cercanas son ahora el foco de atención.
Durante este tránsito te darás cuenta de que este tipo
de relaciones te demandan ahora más atención, y te ponen a prueba.
A
menudo ello resultará en dificultades, por lo que tendrás que realizar un gran
esfuerzo por tu parte para afrontarlas con éxito.
Tus
socios o colaboradores pueden demandarte más esfuerzo, pues sienten que eres
capaz de cumplirlo, y te desafían a que lo demuestres. Este es otro de los
asuntos importantes de este tránsito.
Cuando
entra en esta Casa, Saturno comienza su tránsito por encima del horizonte de tu
Carta Natal. Esto significa que, nuevamente tu atención debe estar puesta en el
mundo exterior, más que en el interior.
Si
te has estado preparando adecuadamente, durante los 14 años que Saturno ha
estado transitando por tus primeras 6 Casas (las del hemisferio Inferior),
consiguiendo saber quién y qué eres realmente, además de lo que eres capaz de
hacer y de lo que no, entonces comenzarás a obtener reconocimiento.
Pero
esta Casa también pondrá a prueba tu capacidad de relacionarte con los demás,
mediante la confrontación con ellos.
Esto
puede ser particularmente obvio en tu profesión, pero también se verá en tus
relaciones personales.
Este
es otro de los factores de tensión de las relaciones conyugales, que suelen
acompañar a este tránsito.
Lo
mejor que logres resolver estos problemas ahora, tanto mejor será para todas
tus relaciones en el futuro inmediato.
Básicamente
la situación es muy simple: Debes poner de tu parte y hacer las cosas lo mejor que puedas en cualquier asunto, y debes
comprender la naturaleza de tus relaciones con los demás.
Exactamente
darte cuenta de cuáles son las expectativas que tienes de ellos, y cuáles las
expectativas de ellos hacia ti.
En otras palabras, a qué tipo de acuerdos has
llegado con los demás.
Una
vez que los reconozcas, adelante con ellos. No es tan importante qué tipos de
acuerdos sean éstos, como que los cumplas.
Este
es el reto principal de este tránsito.
-TRÁNSITOS Y
CONCIENCIA